Al fín me llegó el dvd de La última cima. Tengo que decir que lo ví con entusiasmo y que me hizo reir y también llorar. En este documental me he encontrado con un hombre alegre, entusiasta, feliz, positivo, enamorado de Dios y del hombre ... He visto un hombre que era las 24 horas del día un cristiano, un hombre que era sacerdote.
Me quedo con una cosa. Tengo que intentar imitarle. ¿En qué? En ser cristiana las 24 horas del día, en casa, en el trabajo, en la calle. Me siento orgullosa de ser cristiana y pertenecer a esta gran familia que es la Iglesia y quiero que todos lo sepan cuando me miren.
Mi hijo de 10 años me resumió el documental así ... se parece a Laureano! Y yo estoy encantada con la admiración que Laureano despierta en mi hijo, como Pablo -por lo que ví en en dvd- despertó en todos los que le rodeaban.
Esto no vende en los medios de comunicación pero quizá sea porque nosotros los cristianos no lo somos las 24 horas del día, ese es mi propósito a partir de hoy mismo ... las 24 horas del día se tiene que ver en mi cara la alegría del cristiano enamorado de Cristo!!!
Dios nos hace grandes regalos y, aunque no le conocí, veo que Pablo fué uno de esos regalos.
Pues tu hijo... sí que tiene ojos, sí, madre mía. Y es que a los niños no se les puede engañar, por eso hay que hacerse chiquitos, chiquitos como ellos.
ResponderEliminarEn cuanto a la película... yo también le podía poner nombre a la pregunta que hace el director de: "¿conoces a algún sacerdote como Pablo? ¡Y claro que le puse nombre como tu hijo! Demos gracias a Dios por ellos.
Un abrazo